Narración ficticia sobre elementos presente en la información. Elemento integrado, personajes sobre el tema situación problema.

Narración ficticia sobre elementos presente en la información.

Elemento integrado, personajes sobre el tema  situación problema.

La ciudad de Huejutla, Hidalgo;  lugar de gran riqueza y hermosura en tierras ricas en el cultivo, fue tomada por un ejército invasor comandado por el Coronel Tourre (Latour), Doña Carlota, mujer humilde, vecina de la localidad que conocemos como Barrio Arriba que dedicaba sus días a trabajar como empleada doméstica, lavando y planchando ropa (o sin ropa) en diferentes casas de los familiares más adinerados donde frecuentemente asistían a comer algunos franceses y platicaban de sus propósitos a futuro para el pueblo, en los cuales era clara su ambición por dominar por completo a Huejutla y hacerse ricos pagando mano de obra barata y hacer de esta región una villa francesa lo que a ella le causaba descontento ya que su gente oriunda de esta tierra, viviría esclavizada y con futuros gobiernos extranjeros, todos los días de una larga jornada de trabajo llegaba a su humilde casa y en ocasiones invitaba a sus compadres a tomar café y se platicaba sobre los comentarios que escuchaba en las diferentes casa donde trabajaba. Ellos intrigados por lo que sucedería pensaba de qué manera evitar que los planes de los franceses se hiciera realidad, pensaban en reunir más personajes que no sintieran temor por lo que sucedería y que estuvieran dispuestos incluso a perder su vida.

Tratando de hacer alegre la vida de los huastecos carlota organizaba tardes de huapango en las calles del barrio a las que asistía la gente más humilde y trabajadora del lugar, ella nunca manifestó pero todos sabían que estaba enamorada del Antonio Reyes Cabrera “ El Tordo”.

Una tarde caluroso de mayo luego de un día de trabajo, su patrona la mando a dejar un recado al cuartel imperialista y fue grande sus sorpresa en lo que ahí estaba la bandera de México tirada en el piso como trapo viejo siendo pisoteada por todos los que ahí estaban y al mirar hacia el cielo, pudo ver ondear la bandera Francesa acontecimiento que causo la furia de Doña Carlota que al terminar su jornada de trabajo se dirigió rápidamente a la casa de su compadre el Tordo a  contarle los hechos, el decidió organizar rápidamente el movimiento con la gente que simpatizaba con ellos, avanzando rápidamente hasta Ixcatlan a donde ya con las esposas de los valientes llevaron enchiladas y café, por lo que los franceses no sospecharon nada ya que pensaban era parte de las fiestas que continuamente realizaban, y la madrugada del 20 de mayo cayo una fuerte lluvia como si el cielo llorara por lo que sucedería en la huasteca, entonces cansados, hambrientos y desesperados por su futuro incierto pero el tiempo estaba a su favor ya que la pólvora y las armas que se habían mojado se secaron durante la mañana del 21 de mayo, Doña Carlota les dio aviso de que los imperialistas estaban muy tranquilos y que era buen momento para atacar.

Entonces “el Tordo” con su improvisado ejercito, ataco por la noche a los franceses, con gran habilidad tomaron Huejutla ya que mucha gente se unió al movimiento desde diferentes puntos estratégicos del lugar, iniciando un combate que duro aproximadamente 5 Horas tiempo durante el cual Doña Carlota y las demás esposas proporcionaban parque y armamento para que los combatientes estuviesen bien armados, al ver el inminente triunfo de los huejutlanses se llenó de alegría y Felicidad la cual se vería opacada repentinamente, por una bala perdida que hirió de muerte a su amado Antonio y corriendo hasta donde él estaba caído  tomándolo en sus brazos le confeso sus amor, él la miro y diciéndole yo la eh querido siempre murió en sus brazos, ella triste y desconsolada murió a los 86 años de edad amando a su querido Antonio y esperando reunirse con él.